Descubrí el Scrapbooking en el año 2.005, en esa época vivía en Chiclayo y como imaginarán, era imposible conseguir el material aquí. Trataba de aprovechar cualquier papel bonito para hacer mis páginas.
En uno de mis viajes a Brasil, encontré una tienda en la que vendían algunos papeles, creo que fueron algo de 6 diseños (los cuales tengo hasta el día de hoy).
En Julio del 2.006, viajamos con Sebastián a Orlando y fue mi primer contacto con una tienda de manualidades en la que había también material para Scrapbooking, Michaels.
La verdad que después de ver tantos papeles tan bonitos, aquellas páginas que había preparado me parecieron tan simples y sin gracia que termine deshaciéndolas. Lo más gracioso o podría decir ridículo de todo esto, es que cuando voy a empezar algún proyecto, me da pena usar tal o cual papel y pienso guardarlo para un álbum más bonito, y así, me fui llenando de papeles, y es que en realidad tengo tantos que no se si llegare finalmente a utilizarlos todos. El hecho es que así como tengo muchos papeles, también tengo muchas fotos que aun están en cajas y no se por dónde empezar.
Aquí en Perú, la primera tienda que encontré fue Scrapbook Perú, memorias de papel y ahí conocí a Nina, muy simpática.
Con tantas fotos guardadas en todos estos años, (para variar en una caja) no ha sido muy fácil empezar, porque ¿por dónde empezar?. Con los años también he acumulado tantos papeles, todos tan lindos y diferentes que se hace difícil escoger cuales utilizar, y qué decir de la pena que da usar aquellos que más te gustan, porque los guardas siempre para una foto más bonita.
En todos estos años también, los productos han variado tanto y ahora hay tantas alternativas y estilos de Scrapbooking que los trabajos que hice inicialmente me parecen muy simples y en oportunidades hasta sosos, pero creo que es algo por lo que todas hemos tenido que pasar. Hemos ido evolucionando en nuestras técnicas y también en nuestros gustos.
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